domingo, 9 de marzo de 2014

Fresca, joven y descarada: Bea Arce y sus botas rojas


Beatriz Arce Adrados es la más joven del grupo. Aporta frescura y espontaneidad con su forma tan diferente de ser. Tiene una visión del diseño, del arte y de la creatividad única y disfruta al máximo cada momento. Ella, ilustradora, bloguera y twittera profesional, nos explica más sobre ella y su modo de ver el mundo!

AR: ¿De dónde eres? ¿En qué ciudad naciste y cómo piensas que ese hecho te ha influenciado?
BA:He nacido y vivido toda mi vida en Madrid. El vivir en el centro de una capital me ha permitido convivir con todo tipo de culturas o conocer diferentes formas de ver el mundo.

Estar cerca del paseo del arte de Madrid, rodeada de galerías de arte, centros culturales o escaparates ha facilitado centrar mi atención en los aspectos estéticos y cuál es su propósito.

AR: Estas estudiando diseño: ¿cómo ves el futuro del diseño en líneas generales? ¿Piensas qué es esencial para los avances sociales? ¿Por qué elegiste diseño y no otro tipo de expresión artística?

BA: Cada vez somos más conscientes de la importancia que ejerce la forma  y la estética en nuestros objetos cotidianos más allá de la funcionalidad. El diseño hoy más que nunca juega un papel clave en la sociedad. Estamos en un momento de grandes cambios donde es necesario romper con las ideas establecidas y transformar realidades, el diseño es un factor cultural, que afecta a la vida y la felicidad de las personas y al desarrollo social. Siempre he sentido la necesidad de comunicar y expresar mis ideas y mis sentimientos; materializaros y que a la vez cumplieran una funcionalidad. Por ello me decidí a estudiar diseño, una buena combinación entre estética y función.

AR:¿Piensas que el diseño es arte? ¿Sientes que el arte intenta excluir al diseño de su categoría?
BA: Siempre se hace una separación entre diseño y arte, las diferencias más caracterizadas que se hace es que el arte no tiene una función de uso, es subjetivo, es creado por el creador con sus manos siendo una obra exclusiva. El diseño, en cambio se le define como  funcional, mecanizado, racional y realizado para una mayoría. Esta separación podría ser válida para unos inicios, pero hoy en día el diseño también se ha convertido en objetos exclusivos que atienden más a la estética que a la función, sirviendo de objetos decorativos, pero sin embargo no pierden su clasificación como diseño. 

En la actualidad algunos diseñadores se centran en la originalidad del producto, creando un objeto llamativo y no funcional, en ese caso, lo que en un principio fue pensado como diseño ha pasado a ser arte.

Realmente arte y diseño pertenecen a categorías diferentes aunque ambas intentan transmitir unas sensaciones e emociones al espectador con la intención de comunicar o vender.  Aunque se diga que el arte no tiene en su fin la funcionalidad, la misma intención de expresar o denunciar una causa con su arte ya es una función que no valoramos.


AR: ¿Cuál ha sido tu proyecto más reciente? Explícanos un poco más.

BA: Mi último proyecto fue la grabación de un segundo cada día durante varios meses y la unión de estos en un único video, así en pocos segundos se puede hacer uno la idea sobre las experiencias que viví en esos meses.
http://vimeo.com/74367167


AR: ¿Por qué piensas que las mujeres trabajan tanto la expresión corporal, performance, danza? Y como mujer, ¿qué es lo que te atrae de esta forma de arte?
BA: La mujer siempre ha sido juzgada  y encerrada en su cuerpo, esas formas femeninas que incitan, tratadas  como objeto de deseo, por ello quizás utilizar su propio cuerpo como elemento para comunicar todo aquello que quieran expresar.

AR: Define en una frase, palabra, expresión el colectivo del que formas parte.
BA: Inquietud por experimentar  y crear 

AR:Cuéntanos un poco sobre tu performance y tus intenciones, lo que buscas y lo que esperas conseguir.
BA: A través de mi cuerpo interpretare cómo evoluciona el fuego y como este se descontrola. Desde una pequeña llama de la vela que relaja y baila lentamente al son de aire, hasta el gran incendio que destruye, desconcierta y te envuelve en una atmosfera de frustración.

El fuego como seducción y como objeto de ira.